En Never Going Home vas a interpretar a un soldado raso, arrastrado a la guerra y arrojado a la pesadilla en que se ha convertido todo el frente. Puede que sirvas bajo bandera británica, o que seas un recluta del Imperio otomano. Lucharás en las trincheras de Francia, en el Frente Occidental, o en los fríos páramos del Frente Oriental bajo el invierno ruso. Pero no importa tu nacionalidad, ni que tu bandera pertenezca a las Potencias Aliadas o a las Potencias Centrales. Cada día que pasa, esta guerra se libra más contra el terror y las monstruosidades que contra enemigos humanos.
Tu humanidad, tus recuerdos y tus emociones son tesoros que los Otros ansían robarte, alimento para sus pútridos cuerpos. Deberás tratar de conservarlas mientras ellos te Susurran y te arrastran hacia la locura y la muerte.
Cuentas con tu astucia, la dudosa lealtad de tus compañeros, unas cuantas armas y esos extraños poderes que has aprendido de esos tenebrosos Susurros que resuenan cada día más fuerte en tu mente…